jueves, 1 de octubre de 2009

MVM (XLV). Extrañas amistades

Decidí probar suerte con Phil, que accedió gustoso a clavármela en un callejón.

Me gusto tanto que empecé a acudir a diario a por mi ración de rabo, pero pronto empezaron a correr rumores por el pueblo acerca de lo puta que era.


¡Phil debía haberse ido de la lengua, por lo que decidí dejar de follar con él!

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