Empecé a mear sobre el cuerpo de Justin, viendo como mi meada resbalaba por su cuerpo.
Mi hijo se pajeaba mientras la meada le caía en su caliente boca, el intentaba por todos los medios tragarsela toda, pero le resulto imposible.
Acabo corriéndose y los trallazos de leche casi llegaron al techo.
Desde entonces ambos disfrutamos plenamente del sexo, que cuanto mas sucio sea mejor, ...
FIN DE LA PRIMERA PARTE.
Mi hijo se pajeaba mientras la meada le caía en su caliente boca, el intentaba por todos los medios tragarsela toda, pero le resulto imposible.
Acabo corriéndose y los trallazos de leche casi llegaron al techo.
Desde entonces ambos disfrutamos plenamente del sexo, que cuanto mas sucio sea mejor, ...
FIN DE LA PRIMERA PARTE.
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