Sabía cabalgar porque mi tío me había enseñado de una forma muy peculiar, me sentaba sobre su polla y me obligaba a mantener el equilibrio mientras el caballo galopaba.
Aún así no salí con ellos a buscar a unos ladrones de caballos, con tan mala suerte que al final caí en las garras de esos forajidos.
Aún así no salí con ellos a buscar a unos ladrones de caballos, con tan mala suerte que al final caí en las garras de esos forajidos.
Este método para aprender a cabalgar es el más efectivo que he visto nunca.
ResponderEliminarLo he copiado en mi blog:
http://battlesofthegrandpa.wordpress.com/2010/04/18/julius-nos-ensena-a-cabalgar/
Un saludo.
Grandpa