martes, 24 de noviembre de 2009
MVM (LII) El retorno de Barry
Tenia tantas ganas de ver de nuevo a Barry que pensaba que estaba soñando cuando lo vi aparecer en la puerta.
Mi hermano se acerco a mi mientras se sacaba la dura polla del pantalón de la marina.
Mientras le contaba como me había ido y lo mucho que lo había echado de menos ese tiempo no dejaba de agarrarle su pollón.
¡Tenía miedo de que se me escapara de nuevo si lo soltaba!
Mi hermano se acerco a mi mientras se sacaba la dura polla del pantalón de la marina.
Mientras le contaba como me había ido y lo mucho que lo había echado de menos ese tiempo no dejaba de agarrarle su pollón.
¡Tenía miedo de que se me escapara de nuevo si lo soltaba!
BAG (XLIII). Dentro de la caseta
Apenas habían pasado unos minutos desde que se hubiera ido el último albañil de la obra y ya tenia el duro pollón de Jay en mi garganta.
El se quitaba el pantalón a patadas mientras yo intentaba por todos los medios evitar que aquella polla se escapara de mi boca.
Cuando me la empezó a clavar dentro de la caseta donde se cambiaban de ropa, las paredes se movían como si dentro de ella hubiera estallado una bomba, ...
El se quitaba el pantalón a patadas mientras yo intentaba por todos los medios evitar que aquella polla se escapara de mi boca.
Cuando me la empezó a clavar dentro de la caseta donde se cambiaban de ropa, las paredes se movían como si dentro de ella hubiera estallado una bomba, ...
jueves, 5 de noviembre de 2009
GNT (XXX) ¡Pillados!
Cuando mis padres se fueron a comprar Larry y yo subimos corriendo al piso de arriba para follar.
En unos minutos ya estaba comiéndole la polla, mientras el suspiraba como una perra en celo.
Estábamos tan excitados que no oímos como el coche de mis padres volvía a la granja.
Cuando Papa abrio la puerta de su habitación y vio a Larry clavandomela hasta las amígdalas se puso furioso y salio en busca de su escopeta.
En unos minutos ya estaba comiéndole la polla, mientras el suspiraba como una perra en celo.
Estábamos tan excitados que no oímos como el coche de mis padres volvía a la granja.
Cuando Papa abrio la puerta de su habitación y vio a Larry clavandomela hasta las amígdalas se puso furioso y salio en busca de su escopeta.
BAG (XLI) Quedando para otro día
El albañil se acerco a mi cama y me endoso su duro pollón en la boca. Yo se la comía con ganas hasta que se corrió llenándome la boca de leche.
Empecé a degustarla y a jugar con mi lengua para extraer todas las gotas de leche que quedaban en su rabo. Al cabo de un rato la polla de Jay se puso dura de nuevo.
Como un buen anfitrión me volví a comer aquel fenomenal pollón.
Cuando se corrió y se guardaba la polla me dijo que me esperaba al dia siguiente en la obra a partir de las seis cuando todos los demás albañiles se hubieran ido.
Yo le dije que si con la cabeza, apenas podía hablar tenia la boca llena de semen y las mandíbulas casi desencajadas.
Empecé a degustarla y a jugar con mi lengua para extraer todas las gotas de leche que quedaban en su rabo. Al cabo de un rato la polla de Jay se puso dura de nuevo.
Como un buen anfitrión me volví a comer aquel fenomenal pollón.
Cuando se corrió y se guardaba la polla me dijo que me esperaba al dia siguiente en la obra a partir de las seis cuando todos los demás albañiles se hubieran ido.
Yo le dije que si con la cabeza, apenas podía hablar tenia la boca llena de semen y las mandíbulas casi desencajadas.
lunes, 2 de noviembre de 2009
CHG (VI). Bebida energética.... y fin
Los chicos aprenden rápido y el entrenador descubre lo dispuestos que están para probar cosas nuevas.
Necesitan saber si lo están haciendo bien y se sienten muy reconfortados cuando el entrenador los anima a seguir con el ejercicio.
Para acabar de relajarse no hay nada mejor que tomarse un buen vaso de leche calentita.
El nuevo se esmera en comerse hasta la ultima gota, ya que no quiere que el entrenador lo aparte del equipo por no hacer bien el ejercicio.
Aqui termina esta caliente historia de Joe.
¡Espero sus comentarios!
Necesitan saber si lo están haciendo bien y se sienten muy reconfortados cuando el entrenador los anima a seguir con el ejercicio.
Para acabar de relajarse no hay nada mejor que tomarse un buen vaso de leche calentita.
El nuevo se esmera en comerse hasta la ultima gota, ya que no quiere que el entrenador lo aparte del equipo por no hacer bien el ejercicio.
Aqui termina esta caliente historia de Joe.
¡Espero sus comentarios!
GNT (XXIX). A la orilla del rio
Se aproximaba el invierno y cada vez hacia mas frío, pero eso no impidió que nos escapáramos una siesta a la orilla del río donde Larry me folló por primera vez.
Le devoraba el duro rabo cuando Larry me dio la vuelta bajándome el pantalón de un tirón.
¡Vamos a follar, casi no tenemos tiempo!
Me dijo con un gruñido.
Le devoraba el duro rabo cuando Larry me dio la vuelta bajándome el pantalón de un tirón.
¡Vamos a follar, casi no tenemos tiempo!
Me dijo con un gruñido.
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