viernes, 30 de marzo de 2012

VIK (022) Un respetable hombre de fe

Cuando mama nos sorprendió entre las lápidas del cementerio follando como locos se puso furiosa y decidió que la mejor manera de reconducir mis hábitos era haciendo que ingresara en un monasterio.

Tal vez si me convertía en un respetable hombre de fe acabaría olvidando esos ritos paganos y sucios a los que estaba tan acostumbrado. ¡Pero en ese momento para mi solo había una religión1 ...¡Queria ser follado por todas las pollas del mundo! ...¡Esa era mi única fe!

No hay comentarios:

Publicar un comentario